Estar bajo el sol

Salga a caminar. Encuentre un trozo de acera con rayos del sol. Coloque sus pies firmemente sobre este parche de concreto. Cierre los ojos y mantenga las manos a los lados.

Respire. Quédese aquí todo el tiempo que quiera. Siempre que pueda. Sienta el calor del sol lo envuelve. No necesita pensar, no necesita preocuparse por su respiración. Este es simplemente un momento para estar quieto.

Apunte de: Jessica Frances Gregoire Lancaster